El centrocampista colombiano James Rodríguez tuvo un ataque de ira en el vestuario del Bayern, en ausencia del entrenador Niko Kovac contra quien se dirigían sus críticas tras tres partidos del club bávaro sin ganar y poca participación del jugador sudamericano.
"No estamos en Frankfurt" dice el rotativo 'Bild' que gritó el cafetalero, en alusión al anterior equipo de su actual estratega, el Eintracht.
James, según los medios alemanes, está descontento por su ausencia en la mayoría de los partidos en la alineación titular y se asegura que en el vestuario dijo que quería irse y así se lo iba a comunicar al entrenador.
El descontento de James, según 'Bild', es sólo un síntoma de lo que está ocurriendo en el vestuario del Bayern en medio de la minicrisis.
Los jugadores tienen una serie de motivos de descontento con Kovac. En primer lugar se critica su costumbre de que con frecuencia habla en croata, y no en alemán que domina perfectamente, con el segundo entrenador, su hermano Robert Kovac, con el entrenador de porteros, Toni Tapalovic, y con el director deportivo Hasan Salihamidzic.
Por otro lado, los jugadores extrañan un claro concepto para el juego ofensivo, a lo que estaban acostumbrados en los tiempos de Jupp Heynckes y Pep Guardiola.
Además, la rotación extrema a esta altura de la temporada tiene desconcertados a los jugadores, muchos de los cuales después de jugar un buen partido se ven en el siguiente compromiso en el banquillo.
El Bayern viene de una semana maldita, en la que perdió el liderato de la Bundesliga frente a el Borussia Dortmund, tras empatar con el Augsburgo y perder con el Hertha; mientras que en la Champions League no pasó de un empate a un gol con el Ajax.