Georgia ha logrado un hito histórico al clasificarse por primera vez para la Eurocopa, que se celebrará en Alemania en 2024. En un emocionante partido disputado en Tiflis, Georgia eliminó a Grecia, un equipo que no ha participado en el torneo desde 2012 y fue campeón en 2004. El partido, marcado por la tensión y con pocas oportunidades claras de gol, se resolvió en la tanda de penaltis, donde Mamardashvili, el arquero del Valencia, jugó un papel crucial al detener uno de los penaltis.
Ante 53 mil espectadores que llenaron el Dinamo Arena de Tiflis, ambos equipos mostraron un juego cauteloso, con Georgia iniciando fuerte impulsada por el apoyo de su afición y la vuelta de Kvaratskhelia, ausente en la Semifinal contra Luxemburgo. A medida que el partido avanzaba, la balanza se inclinaba hacia Grecia gracias a su sólida defensa. Sin embargo, las ocasiones más claras llegaron para Georgia en los minutos finales, aunque el partido se fue a la prórroga sin goles.
El tiempo extra mantuvo la igualdad, sin que ninguno de los equipos consiguiera romper el empate, lo que llevó la definición al dramático escenario de los penaltis. En este duelo de nervios y precisión, Georgia se impuso gracias a las actuaciones destacadas de sus jugadores y, en particular, de su portero Mamardashvili. Kvekveskiri se convirtió en el héroe al marcar el gol decisivo que aseguró la clasificación de Georgia para el torneo, donde compartirán el Grupo F con Turquía, Portugal y la República Checa.
Este logro representa un momento histórico para el futbol georgiano, marcando la primera vez que el país competirá en una Eurocopa, y lo hace con la esperanza y el apoyo de una nación entera detrás.
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