El técnico del Manchester City, Pep Guardiola, planteó la posibilidad de las entidades rectoras del futbol impongan una sanción al Campeón de la Premier League por los presuntos intentos de evadir las reglas de Juego Limpio Financiero.
El City ha dejado que Guardiola sea quien responda las preguntas sobre los mensajes internos que salieron a relucir en medios europeos, mientras los ejecutivos se niegan a hablar al respecto. El club inglés no ha cuestionado la autenticidad de las conversaciones que muestran cómo utilizó empresas vinculadas a Abu Dabi United Group, el consorcio propietario del equipo, para aumentar los ingresos en un intento por reducir las pérdidas y cumplir con las regulaciones de la UEFA.
“Si hay algo indebido, seremos castigados”, declaró Guardiola en una conferencia de prensa de cara al derbi del domingo contra Manchester United.
El City, que ha sido propiedad del jeque Mansour de Abu Dabi durante una década, fue castigado por la UEFA en 2014 por violar el programa “Juego Limpio Financiero”. El acuerdo de conciliación consiguió que el club sólo perdiera 20 millones de euros (23 millones de dólares) en premios monetarios de la Liga de Campeones. La UEFA no ha señalado esta semana qué tan consciente era del ardid del City, revelado por la revista alemana 'Der Spiegel', para encontrar “soluciones creativas” para encubrir los gastos y evadir la supervisión de la UEFA en los fichajes de jugadores.
“Al final, la UEFA, FIFA y la Federación Inglesa tendrán que determinar si hicimos mal”, agregó Guardiola. “Si hay algo indebido, lo aceptaremos, pero yo escucho lo que mi club me ha dicho y confío mucho en ellos”.
El Man City, adquirido por Abu Dabi United Group en 2008, se exponía a la expulsión de la Liga de Campeones en 2014, si una Comisión de Finanzas de la UEFA hubiera concluido que el club inglés había quebrantado el “Juego Limpio Financiero", reglamento que se concibió para mantener a raya el gasto excesivo en fichaje.