Hace cinco años, en la Eurocopa pasada fueron la cenicienta. En Francia, en su primera participación en el torneo continental, Gales llegó hasta Semifinales de la mano de Gareth Bale, quien para esta cita llega con hambre y sed de revancha.
El Expreso de Cardiff lleva un par de temporadas a un bajo nivel. Entre lesiones y falta de continuidad busca, con su selección, mostrar el nivel que llevó al Real Madrid a pagar más de 100 millones de euros por él.
Aún sin saber si será parte de la expedición de los Dragones por problemas extracancha, Ryan Giggs ha guiado a una nueva selección con un estilo de presión y ofensivo, con elementos jóvenes como Amapdu o Daniel James, junto a veteranos como Bale, Allen o Ramsey, a una nueva cita continental donde nuevamente no son favoritos, pero con calidad para, al menos, pasar a la siguiente ronda.
El que Bale ande en buen nivel será la clave para repetir lo hecho en el 2016; por lo pronto, en las Eliminatorias, con seis triunfos en ocho juegos, mostraron que son capaces de sobrevivir sin él.
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