El futbolista Dani Alves realizó el pago al juzgado el lunes pasado del millón de euros, la cantidad impuesta por la Audiencia de Barcelona el miércoles pasado para obtener la libertad provisional mientras se resuelven los recursos relacionados con su condena por violación a una joven.
Según fuentes de EFE, la defensa de Alves completó el depósito en la sección 21 de la Audiencia de Barcelona, cumpliendo así con el requisito para su salida inminente de la cárcel de Brians 2, donde estuvo en prisión preventiva durante los últimos 14 meses, desde el 20 de enero de 2023.
Una vez realizada la fianza, Dani Alves será liberado provisionalmente hasta que la sentencia sea firme. Sin embargo, deberá seguir ciertas condiciones, incluyendo la entrega de sus dos pasaportes (brasileño y español), presentarse semanalmente y de manera presencial en la Audiencia, permanecer en España y mantener una distancia de mil metros respecto a la víctima, tanto en su domicilio como en los lugares que frecuente.
La reunión de la cantidad requerida tomó casi una semana, enfrentando múltiples dificultades, considerando la capacidad económica típicamente asociada a un futbolista de élite. Además de la suma impuesta, una de las más altas en los tribunales españoles, y los trámites complejos para transferir dicha cantidad, Alves se enfrentó a un desafío adicional: el daño reputacional potencial al avalar económicamente a un condenado por violación.
Inicialmente, Alves buscó ayuda de la familia de su excompañero en el Barça Neymar Da Silva, quien había manifestado públicamente haber contribuido con 150 mil euros para cubrir una eventual indemnización a la víctima. Sin embargo, la semana pasada el padre de Neymar, con quien Alves coincidió en la Selección Brasileña, en el Barcelona y en el PSG, comunicó que no proporcionaría el dinero.