En una noche electrizante en el estadio Morumbí, Botafogo aseguró su pase a las semifinales de la Conmebol Libertadores tras vencer a São Paulo en una intensa tanda de penales por 5-4.
A pesar de que el equipo carioca comenzó ganando con un gol de Thiago Almada, los locales lograron empatar cerca del final gracias a Jonathan Calleri, lo que llevó la definición al drama de los penaltis.
El partido comenzó con São Paulo intentando salir desde el fondo con el control de la pelota, pero la falta de precisión les costó caro. Una presión efectiva de Jefferson Savarino en la mitad del campo permitió al venezolano recuperar el balón y generar una gran jugada que culminó con un centro peligroso al área.
El arquero Rafael, en un error crucial, dejó un flojo rebote que Thiago Almada aprovechó para poner el 1-0 a favor de Botafogo a los 15 minutos.
São Paulo, en busca del empate, tuvo oportunidades claras, pero la falta de efectividad les jugó en contra. Jonathan Calleri, en una jugada increíble, falló un gol cantado debajo del arco. Sin embargo, el argentino encontró redención al minuto 87, conectando de cabeza un centro para igualar el marcador y forzar la definición desde el punto penal.
En la tanda de penales, los nervios se apoderaron del Morumbí. Mientras que Thiago Almada volvió a aparecer para marcar su penal con solvencia, Calleri, el héroe del empate, falló su tiro, condenando a São Paulo a la eliminación.
Botafogo se llevó la tanda 5-4 y selló su pase a las semifinales de la Libertadores.
El equipo de Río de Janeiro ahora espera al ganador del cruce entre Peñarol y Flamengo, quienes definirán su llave en Montevideo tras el triunfo del Carbonero en Brasil.
