Las intervenciones del arquero Roman Burki evitaron la derrota ante el Lazio del Borussia Dortmund (1-1) que obtuvo el punto que necesitaba para asegurar matemáticamente el pase a los Octavos de Final de la Champions League.
En tres ocasiones Burki salvó a su equipo en la segunda parte, dos ante Ciro Immobile y otra ante un lanzamiento de falta de Andreas Pereira, cuando los italianos más presionaban en busca de la victoria que supusiera una clasificación que ahora tendrá que asegurar en la última jornada, frente el Club Brujas.
El Dortmund jugó sin Erling Haaland, baja de última hora por lesión muscular, y en los instantes finales tuvo que jugar con diez hombres por lesión de Mats Hummels que no alcanzó a ser sustituido. El partido tuvo dos caras: un primer tiempo para el Dortmund, que fue en ventaja con gol de Raphael Guerreiro, y un segundo tiempo para el Lazio que salió transformado del vestuario.
El Dortmund trató de asumir la iniciativa desde el comienzo del partido con un Lazio bastante replegado, que cerraba bien los espacios lo que llevaba a que el equipo alemán tuviera dificultades para generar llegadas claras.
Y fue antes del descanso que el Dortmund logró por fin sacar provecho del dominio territorial que había ejercido y de su mayor posesión de pelota. La jugada se inició con un despeje de Pepe Reina que interceptó Mats Hummels en el círculo central. Hummels jugó con Raphael Guerreiro y este, tras jugar de pared con Thorgan Hazard, marcó con un remate de zurda dentro del área.
En la segunda parte el Lazio salió más agresivo y el Dortmund se replegó mucho y permitió demasiado. El partido, que en la primera parte se había jugado en la mitad contraria, se jugaba cerca de la portería de Bürki. En el 61 llegó la primera ocasión clara, con un remate de Immobile que Burki desvió a córner con una buena parada.
Pero en el 65 llegó el empate, marcado de penalti por Immobile. El penalti se había producido por una falta de Nico Schulz sobre Milinkovic-Savic cuando trataba de despejar la pelota. Inicialmente, el árbitro español Antonio Mateo Lahoz, descartó el penalti pero al instante, alertado por el VAR o por el asistente, lo sancionó sin recurrir al monitor.
En el 87 otra vez tuvo que aparecer Bürki ante Immobile y en el descuento salvó milagrosamente ante un lanzamiento de falta de Pereira.