Tras el polémico encuentro entre Sestao River y Rayo Majadahonda, donde se suscitaron insultos racistas contra Cheikh Kane Sarr, el silbante del juego, Francisco García Riesgo, ha hecho público el acta arbitral revelando detalles cruciales del incidente.
En el minuto 84, Sarr fue expulsado del partido por saltar la bardal y confrontar a un espectador tras un gol. Según el árbitro, una vez en la grada, Sarr tomó violentamente a otro aficionado, lo que requirió la intervención de compañeros para separarlo.
"En el minuto 84 el jugador 13 Cheikh Kane Sarr fue expulsado por: tras la consecución de un gol por parte del equipo local, saltar la valla perimetral del terreno de juego, abandonando el terreno de juego por la zona detrás de la portería donde se encontraba, para producirse de manera violenta contra uno de los espectadores allí presentes, sin poder determinar qué dijeron los espectadores ubicados en esa zona contra dicho jugador.
"Una vez que se encontraba en la grada, dicho jugador agarró a uno de los espectadores allí presentes de forma violenta, teniendo que ser separado por sus compañeros y los espectadores allí presentes. Una vez expulsado, el jugador se produjo de forma violenta contra mi persona, con la clara intención de agredirme, teniendo que ser sujetado por sus compañeros presentes en el terreno de juego, abandonando finalmente el mismo", se lee.
En cuanto a los insultos racistas, García Riesgo detalló que aparentemente varios aficionados locales dirigieron términos racistas como "eres un puto mono" y "puto negro de mierda" hacia Sarr, Sin embargo, aclaró que el equipo arbitral no pudo escuchar ni presenciar directamente estos insultos debido a su posición en el terreno de juego.
"En el minuto 84 de partido y según me comunica el jugador número 13 del equipo visitante, varios aficionados del público, identificados como aficionados del equipo local debido a sus cánticos y su vestimenta, se dirigieron a él en los siguientes términos: 'Eres un puto mono', 'puto negro de mierda' en repetidas ocasiones, al mismo tiempo que realizaban gestos que imitaban la acción de un mono, de índole racista. Dado nuestro posicionamiento en el terreno de juego, ninguno de los miembros del equipo arbitral pudimos escuchar ni apreciar los citados gestos o insultos".
