En la tierra de la fantasía todo puede suceder, y el espectáculo está asegurado. La Eurocopa vive en un mundo alejado del nuestro, donde las grandes potencias no siempre ganan y donde las sorpresas son una constante.
Los equipos que llevan ventaja de dos goles a falta de 10 minutos no siempre ganan, y el drama parece ser una cualidad de los juegos a matar o morir. Las estrellas fallan penaltis que parecerían un trámite para ellos, se rompen hegemonías de más de 50 años de vigencia y los equipos que iniciaban el show como actores de reparto, se han vuelto protagonistas. Todo eso y más sucede en la Euro de la fantasía.
El torneo no ha defraudado por donde quiera que se le vea. Han sido 44 juegos de alarido con 123 goles, para una media de 2.80 por partido, superando, y por mucho, los registros del torneo de hace cinco años, cuando también se jugó con 24 selecciones. Se han marcado nuevos récords en cuanto a penaltis fallados y autogoles.
Venimos de unos Octavos Final de alarido, donde, incluso, en un sólo día festejamos y gritamos 14 goles, el tercer registro más alto para un día de Eurocopa en la historia.
Con vida quedan ocho. Cuatro de ellos no han perdido en el torneo, mientras dos de ellos han sumado pleno de victorias.
Y el espectáculo está asegurado, toda vez que Dinamarca suma dos juegos con cuatro tantos cada uno; España suma dos al hilo marcando cinco goles. Además, siguen con vida los tres equipos que más anotaciones suman en el certamen: España (11), Italia (9) y Dinamarca (9).
Además, en lo individual, Schick (4 goles), Seferovic, Sterling y Lukaku (3 goles cada uno), siguen en carrera por quitarle a Cristiano Ronaldo el liderato de anotaciones del torneo, tras haber marcado cinco y ya estar eliminado.
Los Cuartos de Final arrancan hoy, en donde ocho equipos siguen en carrera, ocho selecciones que han sabido sobrevivir a un torneo que nos ha enamorado y nos ha llevado al límite de las emociones, pues ha sabido transportarnos por un carrusel de emociones al pasar por la alegría, la angustia, la frustración, el enojo y el llanto, todo en 90 minutos o un poco más.
