El primer día de actividad del Gran Premio de Austria fue desastre total para Mercedes ya que sus dos pilotos chocaron sus autos, abandonaron antes de tiempo la tercera clasificación y no pudieron aspirar a la pole position para la carrera sprint de mañana.
Lewis Hamilton tuvo que abandonar la actividad de la qualy 3 luego de que sufrió duro golpe en su monoplaza.
El piloto británico logró clasificar a la última ronda del viernes, pero mientras circulaba por la curva siete perdió el control de su auto y se estampó contra la barrera de protección.
Hamilton salió ileso no así el auto, que quedó destrozado, sobre todo de la parte derecha de adelante.
"Lo siento mucho chicos, lo siento mucho por dañar el auto”, expresó Hamilton por la radio a sus mecánicos, quienes tendrán que trabajar a marchas forzadas para dejar el auto listo ya no para el sábado sino para la carrera del domingo.
Un caso curioso pasó con los fanáticos, en su mayoría vestidos de naranja como muestra de su apoyo evidente a Max Verstappen, pues en cuanto vieron el percance comenzaron a festejar.
Minutos después George Russell pasó por el mismo escenario. El también británico llegaba a la última curva cuando trompeó contra la barrera de protección. Salió la bandera roja y puso fin al día para todo Mercedes
Un prometedor comienzo de fin de semana se convirtió en miseria en tan solo unos minutos.
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