Cuatro campeonatos del mundo, pero la emoción se mantiene como si fuera el primero y más en una temporada muy complicada. Así lo demostró Max Verstappen, quien no pudo contener las lágrimas de alegría cuando le mostraron la bandera a cuadros en el Gran Premio de Las Vegas.
El neerlandés llegó a estar en zona de podio, por detrás de los pilotos de Mercedes, pero no pudo defenderse contra los Ferrari en las últimas vueltas y finalizó quinto misma posición en la que largó. Sin embargo, fue suficiente para coronarse ya que Lando Norris no fue mejor y también terminó en la misma posición de salida, en P6.
Con ello, Verstappen aseguró su cuarto campeonato, a falta de dos carreras para que termmine la Temporada 2024. "Son cuatro en fila, Max, cuatro en fila. ¡Felicitaciones!", le dijo el director de Red Bull, Christian Horner, al piloto una vez que bajaron la bandera a cuadros.
"Eres cuatro veces campeón del mundo. Es un logro impresionante, puedes estar tan orgulloso de ti como lo estamos nosotros. Fue asombroso, bien hecho", añadió el directivo británico por la radio del equipo, en la cual se alcanzó a distinguir el llanto del neerlandés.
"¡Qué temporada! Muchas gracias chicos. Es más especial por lo que hemos vivido y lo dimos todo", respondió Verstappen, que antes de la victoria en Brasil pasó diez carreras sin triunfo, en una de sus peores rachas con Red Bull. A pesar de ello, y de no tener el mejor auto de la parrilla, el neerlandés volvió a coronarse en la categoría.
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