Tras el reciente Gran Premio de Qatar de Fórmula 1, que se caracterizó por temperaturas cercanas a los 40 grados centígrados y altos niveles de humedad, la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) ha anunciado que tomará medidas significativas para salvaguardar la seguridad y el bienestar de los pilotos en futuras competiciones.
Durante la carrera en el circuito de Lusail, varios pilotos, incluyendo a Logan Sargeant, Lance Stroll y Esteban Ocon, enfrentaron dificultades físicas y necesitaron asistencia médica después de terminar su participación.
En respuesta a esta preocupación, la FIA ha emitido un comunicado oficial en el que señala: "La FIA observa con preocupación que la temperatura y la humedad extremas durante el Gran Premio de Qatar de Fórmula 1 de la FIA de 2023 tuvieron un impacto en el bienestar de los pilotos. Aunque sean atletas de élite, no se debe esperar que compitan en condiciones que puedan poner en peligro su salud o seguridad".
La FIA ha anunciado que ha iniciado un análisis exhaustivo de la situación en Qatar con el propósito de proporcionar recomendaciones concretas para enfrentar situaciones de condiciones climáticas extremas en el futuro.
El comunicado de la FIA subraya: "El funcionamiento seguro de los coches es, en todo momento, responsabilidad de los competidores. Sin embargo, al igual que sucede con otros asuntos relacionados con la seguridad, como la infraestructura del circuito y los requisitos de seguridad de los coches, la FIA tomará todas las medidas razonables para establecer y comunicar parámetros aceptables en los que se realizan competiciones".
La FIA busca así garantizar que los pilotos de Fórmula 1 compitan en condiciones seguras y adecuadas, manteniendo su salud y bienestar como prioridad fundamental en todos los eventos deportivos.
