La Fórmula 1 tiene un rey que siempre que puede escapa a los reflectores. Max Verstappen es serio y su tímida sonrisa aparece poco en las portadas o programas de televisión e incluso 'desprecia' el trampolín mediático que impulsó a la categoría reina a otro nivel: 'Drive to survive' de Netflix.
En una entrevista concedida a la revista Time, el Tricampeón del Mundo indicó que no está interesado en seguir los capítulos de la serie que popularizó la F1 para una nueva generación que ha hecho del streaming su medio de entretenimiento preferido.
"No necesito verla porque sé lo que sucede", dijo el neerlandés de Red Bull Racing. "Tampoco me interesa mucho saber de nuestros vecinos cómo vieron su temporada. Conozco mi versión de la historia, y, para mí, eso es suficiente".
La popular serie de Netflix cuenta ya con cinco temporadas y fue un punto de inflexión en la nueva era del Gran Circo desde la compra de Liberty Media, consorcio que se hizo de los derechos del serial por ocho mil millones de dólares en 2017, pues hizo aún más conocidos a los protagonistas de las escuderías.
"Solíamos venir aquí y todos buscaban una selfie con mi esposa en inmigración", comentó el jefe de Red Bull, Christian Horner, quien está casado con Geri Halliwell, excantante de las Spice Girls.
"Ahora dicen: 'oye, eres el tipo de Drive to Survive', lo que me sorprende porque no pensaría que mi popularidad fuera por la serie, sino por mi trabajo en F1", añadió el mandamás de RBR.