La industria de los videojuegos continúa en pleno ascenso al igual que su precio, el cual sigue aumentando, aunque en realidad el público los sigue consumiendo.
Son múltiples factores los que determinan el precio de un videojuego como la consola en la que se estrenará, la calidad del título, el estudio detrás de su desarrollo, pero en México también se tiene que hablar del valor del peso en la economía mundial.
La gran mayoría de los videojuegos se venden en dólares y la cercanía con los Estados Unidos afecta mucho a los precios en México. "Lo que controla el mercado en la compraventa del dólar va a terminar afectando en muchos otros lugares donde justamente la moneda pueda estar depreciada o donde la moneda de curso legal no es el dólar", señaló David Alonso Santivañez, CEO & fundador de GameMetron, para Milenio.
Además, el impuesto por ventas digitales también ha aumentado precios de los videojuegos en los últimos 6 años más del 50 por ciento. De hecho, tiendas como la de PlayStation en línea te muestra un precio y a la hora de realizar la compra sale más caro pues suma el impuesto, a diferencia de Xbox que muestra el precio final además de que hace la conversión directa a pesos.
