Los eSports están a menos de 100 días de debutar en unos Juegos Olímpicos y lo harán en Tokio 2020 aprovechando la importancia del mercado japonés en el mundo de los videojuegos.
Intel propuso el Intel World Open, lo que sería el vento de eSports previo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y que serviría como antesala del evento deportivo. Ante la situación de la pandemia la propuesta sufrió algunos retrasos, pero los torneos clasificatorios se llevaron a cabo online.
Los videojuegos que tendrán la oportunidad de formar parte del evento son Street Fighter V y Rocket League. La razón por la que fueron elegidos es sencilla, y es que no hay muerte ni violencia extrema, y es que el Comité Olímpico Internacional ha manifestado que varios videojuegos competitivos van en contra del espíritu olímpico por los asesinatos dentro de los títulos.
El premio por el que se competirá en ambos títulos es de 250 mil dólares, pero aún no se sabe si se llevará a cabo o cual será su logística debido a las complicaciones que ha provocado la pandemia.
