No cabe duda que los videojuegos están muy cerca de alcanzar a la realidad y, justamente, el nuevo F1 2016 es la viva prueba de ello, ya que la experiencia de juego hace que cualquier gamer se sienta piloto profesional de la categoría reina del automovilismo.
Este año es el primero en que la serie de juegos de F1 lanza una portada especial para Latinoamérica, misma en la que se incluye a los mexicanos Checo Pérez y Esteban Gutiérrez junto a Felipe Massa, Felipe Nasr y, el actual Campeón del Mundo, Lewis Hamilton.
El título ofrece una experiencia de manejo que es completamente realista: cualquier titubeo puede ocasionar un accidente e, incluso, destruir el coche. Al rebasar hay que hacerlo con mucho cuidado de no estrellarse o anclar llantas con el oponente, porque ya no es tan sencillo como en otras ediciones de la serie.
Ahora, ya se tiene un Safety Car real, en pista, y el jugador tiene que esperar a que este se retire de la misma para rebasar a los monoplazas que van por delante, generando así la misma emoción que en el arranque una vez que la carrera es normalizada.
Otra de las funciones completamente mejoradas es la del modo carrera, ya que el gamer puede elegir con qué escudería quiere empezar su carrera, pero siendo consciente de que en cada equipo hay diferentes retos y no por manejar un Mercedes las cosas son más fáciles, ya que se exigirán los máximos resultados toda la temporada.
En el mismo modo carrera, ahora se tiene contacto directo con el agente personal del piloto, por lo que se pueden compartir puntos de vista y ser más exigido a conseguir las metas propuestas desde principio de año; así como hacerle mejoras al monoplaza a lo largo de todo el año.
Una de las novedades es la presencia del Circuito de Bakú, en Azerbaiyán, mismo que es de los más exigentes por sus pronunciadas curvas en un trazado completamente callejero.
Por si fuera poco, el juego cuenta con nuevas caras conocidas dentro del paddock de cada escudería para darle más realismo, haciendo presentes a importantes personajes de la Fórmula Uno, como lo son: Maurizio Arrivabene y Toto Wolff en Ferrari y Mercedes, respectivamente.
