Sebastián Avellino, preparador físico del club peruano Universitario, ha sido detenido y puesto en prisión preventiva en Brasil tras ser acusado de cometer actos racistas durante un partido contra el Corinthians por la Copa Sudamericana. La justicia brasileña dictó la medida el miércoles 12 de julio, según informó el medio Globo.
Avellino, de nacionalidad uruguaya, es acusado de realizar gestos discriminatorios contra los aficionados del Corinthians y de llamar "macacos" (género de primates) a un grupo de hinchas presentes en el estadio Neo Química Arena. Estos actos habrían llevado a su arresto y posterior encarcelamiento.
El preparador físico y el club Universitario niegan las acusaciones. Según un comunicado publicado por Universitario, los mismos seguidores que atacaron a los integrantes de su delegación acusaron a Avellino de forma "tergiversada y subjetiva". Su caso fue tipificado como presunto prejuicio racial, delito que en Brasil puede ser castigado con hasta cinco años de prisión.
Jean Ferrari, administrador de Universitario, confirmó que Avellino recibió prisión preventiva, pero que han presentado un recurso de habeas corpus para obtener su liberación. Ferrari criticó que su trabajador sea tratado como un "delincuente" por las autoridades de Brasil y rechazó lo que consideró "vejámenes de las autoridades brasileñas, que pretenden, sin prueba alguna, cometer detenciones arbitrarias".
El entrenador del club, el uruguayo Jorge Fossati, aseguró que Avellino respondió a las provocaciones de los 'torcedores' abriendo los brazos y tocándose el pecho, "como diciendo por qué a nosotros". Fossati también declaró que no vio ningún acto racista y que lo sucedido es meramente una malinterpretación.
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