Javier Aguirre se ha caracterizado por ser una persona intensa a lo largo de su carrera como entrenador, por lo que el partido que determinaba la permanencia del Mallorca en Primera División no iba a ser la excepción para el Vasco.
Desde el primer minuto del encuentro, al estratega se le notaba inquieto, pues constantemente le reclamaba a los árbitros en busca de una falta. Y es que hubo una ocasión en la que el mexicano pidió una mano, e incluso hizo la seña del VAR, por lo que tras los constantes reclamos, el árbitro no dudó en mostrarle la tarjeta amarilla.
"'Me lo dice a mí, a él, encima se ha echado a correr hasta allá, luego esto, luego la mano, luego lo del VAR'. Por el bien de su estancia en el banquillo todo se tiñe de alegría", dicen en el video.
Fiel a su estilo, el Vasco Aguirre estuvo constantemente mentándole la madre a los jugadores, por lo que al momento del gol de Ángel, el mexicano se tranquilizó aunque no dejó de lanzar insultos al aire, pues sabía que era solamente una anotación de diferencia.
Previo a que terminara el encuentro, el Vasco se volvió a acercar al cuarto árbitro, sin embargo, en esta ocasión lo hizo para justificar sus actos. "Es difícil controlarlo, ha sido muy duro", finalizó.