Venecia ha establecido una tarifa de 5 dólares para los turistas que visitan la ciudad durante las temporadas más concurridas, con el fin de proteger su patrimonio cultural y controlar el exceso de turismo.
Se implementa un cobro para desalentar a los turistas de visitar en períodos de alta demanda y promover otras épocas del año. La medida no aplica a residentes, estudiantes y menores de 14 años.
Respuestas ante la implementación de la nueva medida
El alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, ha implementado una tarifa como un "experimento" para proteger la ciudad, pero ha recibido opiniones divididas. Algunos apoyan la iniciativa, mientras que otros están descontentos.
Un grupo de residentes se manifestó en la Plaza Roma, argumentando que la tarifa es percibida como un impuesto que no aborda eficazmente la cuestión del turismo excesivo.
¿Quiénes pagarán?
Venecia ha implementado un sistema de registro y obtención de códigos QR para los visitantes, con multas de hasta 500 euros por no cumplir. A pesar de que la medida implica un costo mayor al ingreso que genera, es fundamental para educar a la población sobre la distribución de visitas. El sistema estará vigente hasta el 14 de julio y se espera que ayude a recabar datos para ajustar futuras acciones. Estas medidas buscan gestionar el flujo turístico y asegurar la viabilidad a largo plazo de Venecia como un tesoro cultural.
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