La guerra por el agua ya comenzó. En la delegación Iztacalco, vecinos de la colonia Gabriel Ramos Millán decidieron saquear las válvulas del vital líquido ante la escasez, y ante ello la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) tuvo que colocar guardias las 24 horas del día para vigilar las tomas.
A finales de junio, la colonia empezó a padecer por falta de agua durante días, por lo que los vecinos ubicaron las válvulas subterráneas, aprendieron a manipularlas y comenzaron a abastecerse de las coladeras. Incluso empezaron a vender los 20 litros del líquido en 20 pesos. Mientras que en otras tomas, el que se acercaba se llevaba su cubeta o tambo lleno para subsistir.
Entonces, las autoridades capitalinas decidieron custodiar cinco tomas de agua con vehículos de la SSP, tres en la calle Oriente 110, una en la calle de Recreo y Oriente 177, y otra más en La Fortaleza. Hace 10 días, en estas dos últimas vialidades llegaron granaderos para liberar las válvulas de los habitantes, y detuvieron a ocho personas que vendían el agua.
Rosa Pacheco, vecina de la zona desde hace 60 años, aseguró que nunca habían tenido tanta escasez de agua como en las últimas semanas: “Sólo pasaba cuando le dan mantenimiento al Cutzamala, pero ahora fue de la noche a la mañana y durante casi un mes, por eso los vecinos decidieron tomar las válvulas, por la desesperación”.
