Un hombre estuvo muy cerca de ser atacado por un tiburón blanco, ya que mientras se sumergía a convivir con diferentes especies marítimas, dentro de una jaula, el animal rompió la guarida donde se albergaba el buzo.
Las imágenes son escalofiantes y hacen suponer que una tragedia estaba muy cerca de suceder pero, afortunadamente, el turista salió ileso y todo quedó en un susto.
Según ha trascendido, el hombre que se encontraba bajo el mar no corrió peligro, ya que el tiburón mordió una cuerda que tenía atún y cuando estos animales muerden algo, automáticamente les da ceguera momentánea y no pueden nadar para atrás.
