Donald Trump llevó a cabo un famoso dicho mexicano, ya que 'recibió una sopa de su propio' chocolate, al ser ignorado en el saludo, por la primera dama de Polonia.
La esposa del presidente de Polonia, Agata Kornhauser, prefirio saludar primero a Melania Trump y no al mandatario estadounidense, dejándolo con la mano estirada frente a cientos de personas y todos los medios de comunicación, esto tras una reunión entre ambos jefes de estado realizada en Varsovia.
Tras saludar a Melania, Kornhauser volteó la mirada para saludar a Trump, quien en ningún momento bajo la mano.
El presidente de Estados Unidos participará en los próximos días en la cumbre del G8 que se realizará en París.