Fatih Çakmak, uno de los sobrevivientes del lamentable hecho del pasado 10 de diciembre de 2016, donde 29 elementos de seguridad fallecieron a causa de un bombazo a las afueras del estadio de Besiktas, murió en el atentado en un bar de Turquía cuando se llevaban a cabo los festejos de Año Nuevo.
El policía fue una de las más de 35 personas que perdieron la vida en el ataque del 31 de diciembre, donde un sujeto disfrazado de Santa Claus abrió fuego en un club nocturno.