Los retrasos de Slipknot y Evanescence colmaron la paciencia de los seguidores del heavy metal, que desesperados realizaron destrozos en todo el Deportivo Oceanía, por lo que se terminó por cancelar el resto del Knotfest de este sábado.
Todas las molestias y problemas comenzaron desde el inicio debido a la terrible organización del mismo. Los asistentes tuvieron que hacer filas prácticamente para todo, desde comida hasta para ir al baño, situación que no le gustó a la gran mayoría.
Asimismo, gente sin boleto podía disfrutar sin ningún tipo de problema de varios grupos musicales desde el puente peatonal que está a un lado del terreno deportivo, situación que molestó a muchos de los que sí compraron boleto.
Tras un tremendo caos en todos los sectores posibles, Summa Inferno (organizadores) publicó en redes sociales que por cuestiones de seguridad el show de Slipknot y Evanescence (artistas principales) quedaba cancelado por temas de seguridad.
La noticia desató el caos y el vandalismo por parte de los espectadores, que quemaron y destruyeron todo lo que podían a su paso.
Los organizadores afirmaron que si los asistentes abandonaban las instalaciones en forma ordenada, los teleneros tocarían este domingo con las otras bandas.