La única televisión que Joaquín 'El Chapo' Guzmán podría ver desde la cárcel en Nueva York está a espaldas de la bicicleta estática en la que se ejercita, así que el capo más famoso de México no puede entretenerse mientras pedalea. Para colmo, no tiene acceso a series o películas de su elección, sino sólo a un programa de naturaleza sobre un rinoceronte y una que otra película o show que se emite repetidamente.
Ésta es sólo una de las quejas que los abogados de Guzmán describen en una carta dirigida al juez que preside el caso. En el documento público, los defensores del capo alegan que el proceso para hacer peticiones o presentar quejas en la prisión es complicado e incomprensible.
Los abogados de oficio del capo, Michael Schneider y Michelle Gelernt, aseguran que la salud de El Chapo se ha visto afectada por las "inhumanas" condiciones de aislamiento que sufre. Dicen, por ejemplo, que no ve la luz del día, que no tiene comunicación con otros presos o con su esposa y que no puede salir a una zona de aire libre.
Los carceleros del narcotraficante, aseguran los abogados, escogen lo que éste verá en el televisor en la pequeña sala donde puede usar una bicicleta anclada al suelo una hora al día. Sin embargo, debido a la posición de ésta, Guzmán no puede ver la pantalla.
"Este tipo de obstáculos sin sentido no afectan al sistema de seguridad de la prisión, frustran a los abogados y agravan el sentimiento de frustración y aislamiento que sufre el señor Guzmán", asegura la carta divulgada en la base de datos electrónica del sistema judicial estadounidense.