Épica batalla brindaron el campeón mundial Pesado del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) e invicto Tyson Fury y el exmonarca Deontay Wilder, quien cayó noqueado al minuto con 10 segundos del round 11 al para poner punto final a la pelea de trilogía.
“Quiero darle gracias a Dios. Gané una pelea otra vez, la gloria de Dios me dio la victoria, aguanté bastante, (Wilder) es un tipo duro, aguanté muchos golpes.
“Fue una gran pelea esta noche. Siempre he dicho que soy el mejor peleador en este momento del mundo. Peleamos en tres combates y él no me ha dado el crédito, yo si he dicho que es un buen peleador y un gran deportista. Dimos tremendas peleas en 2018, en 2020 y creo que esta ha sido una de las mejores del año”, declaró Fury.
“Bronze Bomber” comenzó a dominar la batalla con su poderoso jab y empezó a presionar en las zonas blandas. Para el siguiente asalto, “The Gypsy King” sorprendió a su rival con un derechazo, que si bien no le hizo daño, lo puso en alerta y respondió con un derechazo al rostro que mandó a las cuerdas a Fury.
En el tercero Fury mandó al estadounidense a la lona, quien se levantó para continuar la pelea y aunque el “El Rey de los Gitanos” intentó terminar la pelea, el campanazo lo salvó.
La venganza para Deontay llegó de inmediato pues mandó en dos ocasiones a la lona a Fury para hacer estallar la T-Mobile Arena en Las Vegas.
Con los gritos desbordados de la afición, ambos peleadores bajaron en ritmo a sus embates, mientras que Wilder presionó con la derecha, Fury contragolpeó y los amarres continuaron.
En el sexto asalto el británico volvió a presionar con sus combinación de golpes, Wilder pone la rodilla en el piso para tomar un aire y continuar la guerra. Fury repitió la dosis y el corazón de Deontay lo mantuvo en el ring a perder de que mostró el rostro lastimado, cansado y desorientado.
En el noveno round el estadounidense metió de nuevo la derecha y aunque en el décimo volvió a visitar la lona, se levantó para aferrarse a la victoria que no llegó.