La tercera pelea entre las leyendas del boxeo mundial Julio César Chávez y Óscar de la Hoya es un hecho. Solo el campeón olímpico y 10 veces monarca mundial en seis divisiones pidió a Chávez que no le pegue tan duro.
"Es una pelea de exhibición, así que no me pegue fuerte", dijo entre risas De la Hoya, quien estuvo presente en la conferencia 'Martes de café' del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
"Ustedes saben que lo respeto y lo quiero muchísimo y él es mi compadre. A mí me gustaría hacer una tercera exhibición y la razón por la que me gustaría hacerla es para donar todo el dinero a buenas causas. El dinero que se recaude, lo que sea, darlo a la fundación de Chávez, que me fascina lo que está haciendo él, para ayudar", agregó.
En las dos ocasiones anteriores, el púgil mexico-estadounidense salió con los brazos en alto. El 7 de junio de 1996 se midieron por el cetro Superligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en juego, y el 18 de septiembre de 1998 disputaron el cinturón verde y oro Welter.
"Le pido a Chávez que me dé cuatro o cinco meses para bajar unas libritas, para ponerme en forma y buena condición física. Estas próximas semanas quisiera hablar con Chávez y hablar de detalles para ver dónde y cuándo, si va a ser sin careta, las onzas de los guantes", expuso De la Hoya.