Los Diablos Rojos del México (31-7) aseguraron la serie ante los Saraperos de Saltillo (20-18) con una contundente victoria de 10-5, gracias a un explosivo rally de cuatro anotaciones en la octava entrada.
La noche fue brillante para la ofensiva escarlata, que conectó 15 imparables, incluyendo siete extrabases. La defensiva también se lució con tres dobles matanzas, mientras que el bullpen fue clave al permitir solo una carrera en 6.2 entradas, asegurando así su séptima serie consecutiva y la doceava en trece disputas.
Robinson Canó fue el MVP de la noche, logrando cuatro hits en cinco turnos, con tres carreras producidas y una anotada. José Rondón y Juan Carlos Gamboa contribuyeron con dos impulsadas cada uno, mientras que Diosbel Arias anotó en dos ocasiones con dos hits en cuatro turnos.
En cuanto al pitcheo, el abridor Ronnie Williams salió sin decisión después de trabajar 2.1 entradas, permitiendo nueve hits y cuatro carreras, con una base por bolas y dos ponches. El relevo fue vital, destacando Daniel Ponce de León (ganador), quien lanzó 4.1 entradas sin permitir carreras, cediendo solo dos imparables y ponchando a cuatro. Conner Menez, Tomohiro Anraku y Jake Sánchez completaron la sólida actuación del bullpen.