Los Diablos Rojos del México se vieron envueltos en polémica luego de que Leones de Yucatán pidiera a la Liga Mexicana de Beisbol que los investigara por presuntamente robar y manipular las señales en la transmisión de los partidos de la Final de la Zona Sur en el Alfredo Harp Helú.
Tras las investigaciones realizadas, la LMB determinó que sí existió una manipulación en las tomas de la transmisión de televisión por parte del productor del juego asignado, aunque revisó el resto del material y no encontró un patrón, por lo que calificaron este suceso como un 'hecho aislado'.
Tras la decisión de la liga, los Escarlatas emitieron un comunicado donde condenan las injusticias y las trampas. Además aseguran en el mismo que este tipo de acusaciones no aportan en nada al deporte mexicano.
"Las acusaciones sin fundamento, la consecuencia mediática y el daño moral que se hace a Diablos Rojos del México son lamentables, pues no aportan nada en lo positivo a la construcción del deporte sano que se requiere en el país", se lee.
Asimismo, el equipo capitalino indicó que ellos responderán en el diamante, como suelen hacerlo. "A toda la afición escarlata: No permitiremos que se haga algo indebido en nuestro que equipo que tanto amamos. No nos distraigamos, concentrémonos en el juego y contestaremos, como siempre, dentro del terreno de juego", agregaron.
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