Dicen que los récords están para romperse, pero en la NBA hay jugadores que tuvieron un juego o toda una temporada de ensueño, cosa que puso inalcanzables sus marcas en la historia del baloncesto de Norteamérica.
Wilt Chamberlain es un ejemplo claro de lo antes mencionado, ya que la leyenda de los Sixers y los Lakers tiene marcas que son imposibles de romper. Chamberlain era una maquina en la duela y tiene el récord de más tiempo en la duela en una temporada, con un promedio de 48.5 minutos por juego, solo se perdió ocho minutos aquella campaña de 1961-62, porque fue expulsado.
Otra marca que tuvo el mítico ‘The Big Dipper’ son sus 118 juegos con 50 o más puntos, cuatro veces más que el segundo lugar que es Michael Jordan con 31. Pero el más impresionante de todos es su juego de 100 puntos en 1962, contra los Knicks, Chamberlain anotó 36 tiros de campo y 28 en la línea de libre.
Aunque también hay marcas que como equipo hoy en día son difíciles de conseguir. Este es el caso de los Phoenix Suns, quienes anotaron 107 puntos en la primera mitad. Fue en la temporada de 1990-91 contra los Nuggets. Los Suns terminaron el juego con 173 unidades para empatar otra marca como el equipo con más puntos anotados, sin contar tiempo extra.
Pero el sueño de todo niño aficionado al baloncesto es ser campeón de la NBA, cosa que muchos jugadores han conseguido pero Bill Russel consiguió ese sueño 11 veces. ‘Russ’ jugó 13 temporada en los míticos Celtics que dominaron la década de los 60’, además que Russell tuvo una fuerte rivalidad con Wilt Chamberlain siendo estos dos jugadores quienes tuvieron números que son imposibles de romper en estos tiempos.