Los Playoffs dentro de la burbuja han sido tan caóticos que por primera vez desde 1969, ninguno de los dos mejores sembrados disputará la Final en la Conferencia Este. Celtics y Heat se disputarán el boleto a las Finales de la NBA en la revancha de la serie ganada en 2012 por Miami, cuando despachó en siete juegos a Boston para a postre erigirse como el nuevo monarca de la liga.
Los Celtics -tercer cabeza de serie- y el Heat -quinto sembrado- eliminaron a los campeones Raptors y a los líderes de la campaña regular Bucks, respectivamente, en la segunda ronda de los Playoffs. Boston jugará su tercera final de conferencia en cuatro temporadas, mientras que Miami alcanzó la penúltima ronda de la postemporada por primera vez desde 2014.
Los irlandeses habían sido dados por muertos cuando Kyrie Irving y Al Horford se marcharon en la agencia libre, pero la llegada de Kemba Walker revitalizó una plantilla que había sido echada a menos la temporada pasada, después de apariciones consecutivas en finales de conferencia.
El Heat, a su vez, logró dar la campanada de los Playoffs al eliminar a Milwaukee, llevándose la serie por un contundente 4-1 ante un equipo que había ganado el 76.7% de sus partidos en la fase regular, pero que ya se había visto que en la Burbuja no había encontrado su mejor ritmo. Las claves del Heat pasaron por el 37.3 por ciento de acierto desde los triples que tuvieron con Jae Crowder como factor clave, tirando 22-51 para un 43% y así moldear su heroico triunfo.
Boston ganó ambos encuentros entre los dos equipos antes de que la liga suspendiera su temporada desde mediados de marzo hasta finales de julio por el coronavirus, pero muchas cosas han caminado desde entonces. En el único antecedente en la Burbuja, Miami bombardeó a los bostonianos desde el perímetro: El Heat intentó un 55.8 por ciento de sus lanzamientos de campo desde el perímetro, metiendo 15 de sus 43 intentos. Ganó por 112-106 con 21 puntos de Bam Adebayo y otros tantos de Duncan Robinson, incluso sin la presencia de Jimmy Butler.