Un equipo de árbitros portugués prohibió participar en un partido de baloncesto a una jugadora musulmana de 13 años de edad, debido a que portaba una camiseta de manga larga por debajo de la vestimenta oficial.
En duelo disputado el domingo pasado en la ciudad de Tavira, la adolescente, integrante del equipo Sub 16 Tavira Basketball Club que jugó ante el Inmortal Basket Club, no fue amonestada por llevar medias y pañuelos, sino por "no exponer los brazos", según argumentó el equipo de árbitros.
La negativa de los árbitros, que no aceptaron como argumento la religión de la joven, salió adelante pese a que la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) modificó su reglamento hace dos años para que los jugadores musulmanes pudieran cubrir "cabeza, brazos y piernas".
Ante la imposibilidad de participar en el encuentro, la jugadora vio una parte del partido en el banquillo, hasta que finalmente se marchó a los vestuarios, donde "lloró y rezó", según recogen hoy algunos medios portugueses.
Por su parte, el entrenador y subdirector del grupo, André Pacheco, lamentó la situación y destacó la "calidad deportiva" de la adolescente musulmana.
"Esta actitud es inaceptable", confesó el preparador, que planteó incluso la participación de un observador oficial. El técnico puntualizó que ésta era la primera vez que se expulsaba a la joven musulmana por su vestimenta, ya que en otras ocasiones el equipo de árbitros "comprendió la situación".