Victoria agridulce. El equipo de los Jets inició la temporada con una victoria de 22-16 frente a los Bills, en donde el debut de Aaron Rodgers terminó con una lesión en su primera serie ofensiva del juego del lunes por la noche en Nueva Jersey.
Todo sucedió en una jugada en la que Rodgers fue capturado por el apoyador de los Buffalo Bills, Leonard Floyd, en la primera serie de Nueva York y el ex de los Green Bay tuvo problemas para salir del césped del estadio MetLife Rutherford.
Posteriormente, Zach Wilson, extitular de los Jets, entró al emparrillado, mientras que Rodgers se fue cojeando al vestuario, con una aparente lesión en el tobillo, la cual temen se trate del Tendón de Aquiles debido a que se podría perder toda la temporada.
El marcador empezó con un gol de campo para ambos equipos, pero antes de terminar la primera parte tomaron la ventaja con un pase de touchdown de cinco yardas de Allen al receptor Stefon Diggs. En el tercer episodio Jets puso otro gol de campo.
En el último cuarto, el receptor estrella Garret Wilson agarró un pase de Zach Wilson para empatar el juego a 13 con el punto extra de Greg Zuerlein, quien también anotó gol de campo desde la yarda 30 para poner el marcador 13-16.
No obstante, los Bills alargaron el partido al empatar con un gol de campo de más de 50 yardas. El duelo se definió con un regreso de despeje en los tiempos extras, dándole a los aficionados un gran Monday Night.
El próximo domingo, los Jets enfrentarán a unos vaqueros que arrasaron con los Giants en la primera semana, mientras que el equipo de Buffalo se medirán ante unos Raiders que ganaron por un punto de diferencia a los Broncos.