Fabián asegura que el Oro de 2012 es su mayor motivación
No habían pasado ni 29 segundos cuando el Tri ya le ganaba al monstruo brasileño en el mítico Wembley. Apenas cinco toques de los mexicanos, balonazo largo de Corona y recuperaba la ‘Canarinha’, pero el hambre de gloria de Marco Fabián le hizo ir a morder la salida. Si uno aprieta, apretamos todos: Aquino fue también, barrió ante el pase de Rafael a Sandro, asistencia a Oribe, que tiró para anotar. México terminó ganando 2-1 y cubriéndose de la gloria olímpica.
El gran sueño se había cristalizado, poner el reto en grande sirvió. La historia se cambió, se enalteció el nombre de nuestro país en nuestro deporte favorito. Lo recuerda hoy Marco y la piel se le vuelve a poner ‘chinita’. Cinco años no son nada.
“Es como si fuera ayer, no tengo duda: ha sido el acto más importante de mi carrera, de mi vida; nunca voy a olvidar, así como el país. A cinco años lo recuerdo con piel de gallina, algo que viví impresionante con mi familia, mis compañeros”, evoca Fabián desde Frankfurt, a días del quinto aniversario de la conquista de la medalla de oro en Londres.
“Lo soñé desde niño, todos sueñan con ir a un Mundial, unos Juegos Olímpicos, con ser una leyenda para tu país y esto fue más allá del sueño: no sólo jugué, sino que gané los Olímpicos, que tengo una medalla de oro, inscrito en la historia de México. Estoy agradecido con Dios, feliz, y cada año lo recordaré”, comenta un emocionado Fabián.
El trofeo de aquella gesta es atesorado en la casa de Marco, por lo que representa, por lo que inspira. “La medalla la tengo bien guardada, la conservo por el significado que está en el corazón, por ser un ganador, de haber hecho historia, por lo que representó para mí y para el país. La uso como motivación, saber que la tengo y recordar que uno puede ser capaz de tantas cosas que a veces no te imaginas.
“Me sirve en mi vida diaria, en mi carrera, tratar de ser ganador y pensar en grande, que viene de la mano del trabajo, pero no cuesta soñar en grande, y espero que para el país sea también motivante, que crean en pensar en grande".
El inicio costó. La recompensa fue grande, hubo paciencia y ganas de trascender. “Cuando íbamos a Londres, yo decía que íbamos por una medalla, me tiraban de loco, que no íbamos a pasar de la primera ronda, hubo muchas críticas, pero creímos en nosotros. El día que conseguimos la Medalla de Oro ahí pensamos, hay que soñar en grande, para obtener logros grandes. Todo es posible”.
El ‘8’ no sólo provocó la recuperación del balón en el 1-0 de la Final, sino que estrelló una genial chilena en el travesaño brasileño, mandó un cabezazo apenas por arriba y puso la asistencia a balón parado para el segundo gol mexicano, el de oro. Se probó a sí mismo que podía lucir ante monstruos internacionales.
“Enfrentamos equipos grandes, con estrellas, a Brasil en la Final, y nunca nos dio medio. Nos sentíamos tan unidos y fuertes.
“Hablamos de jugadores tremendos: Neymar, Hulk, Oscar, Thiago, Marcelo… ¡súper importantes! Eso nos motivó. Era un cuento: Brasil, el gigante con estos futbolistas, y en Wembley”.
¿México podrá repetir la hazaña olímpica? Marco no tiene dudas: “¡Todo es posible! Claro que se puede repetir, se pueden ayudar de la base, de la palabra que supimos entender nosotros desde el inicio: trascendencia, que buscamos eso, ser alguien histórico, el sueño”.
