El Bayer Leverkusen, sin la presencia de Javier Hernández, logró conseguir un sufrido empate 3-3, en su visita al Augsburgo.
Las Aspirinas tuvieron un encuentro difícil, pues apenas a los cinco minutos de inciado el encuentro, Koo Ja-cheol logró abrir el marcador desde fuera del área chica.
Los dirigidos por Roger Schmidt continuaron sin hallarse en el terreno de juego durante la primera parte, y fue así como el mismo Koo, consiguió su segundo tanto, a un minuto del descanso.
El segundo tiempo no mejoró para el Leverkusen, y apenas al 57', Koo Ja-cheol anotó su tercero de la noche para ocasionar que los visitantes se sumieran en una baja anímica notable.
Sin embargo, el Augsburgo no supo manejar su amplia ventaja, y en un partido que parecía ya terminado, Bellarabi conectó un disparo potente para conseguir el de la honra, tres minutos después del gol de los locales.
Pero eso no era todo para el equipo de Schmidt, pues en la recta final del encuentro, en una distracción de la zaga del Augsburgo, Paul Verhaegh mandaba guardar un balón que parecía sencillo en propia meta.
Y al 90', cuando parecía que el Leverkusen iba a tener que conformarse con la derrota, una mano dentro del área de los locales sentenciaba la increíble igualada que estaban consiguiendo las Aspirinas.
Hakan Calhanoglu cobró desde los once pasos para lograr dividir unidades, en un partido que parecía perdido para los visitantes.
Con este empate, el Bayer Leverkusen logró llegar a 36 puntos y cayó a la octava posición, después de que el Wolfsburgo venciera al Borussia Monchengladbach, en la Jornada 25 de la Bundesliga.