En un partido que más pareció un golpe de suerte que un empate merecido, Cruz Azul logró salvar un 0-0 ante Seattle Sounders en el partido de ida de los octavos de final de la Concachampions.
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Durante los primeros 45 minutos, la ofensiva celeste estuvo completamente ausente. Sin tiros al arco ni jugadas claras, Cruz Azul dejó en evidencia sus carencias ante un Seattle que, aunque tampoco mostró gran lucidez, generó mayor peligro.
La tensión del partido aumentó cuando Kevin Mier, arquero colombiano de Cruz Azul, estuvo a punto de convertirse en el villano de la noche.
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En una jugada que pudo haber sido fatal, Mier salió de su zona y permitió que un pase de La Vega casi se convirtiera en un gol para el equipo local. Sin embargo, el árbitro asistente levantó el banderín por fuera de lugar, evitando que el error del portero costara caro.
Fue hasta el minuto 78 cuando finalmente un disparo de Alexis Gutiérrez desde fuera del área exigió una intervención del portero rival, pero, aun así, la jugada no alcanzó a ser lo suficientemente peligrosa como para abrir el marcador.
El próximo 11 de marzo, en el Estadio Olímpico Universitario, los celestes se jugarán su clasificación a los cuartos de final.
