A pesar de haber disputado prácticamente todos los minutos de la Fase Regular con América, Óscar Rojas recordó que una tarjeta roja y una lesión en la rodilla le impidieron jugar los dos partidos más importantes del campeonato: Semifinal y Final de Vuelta, un año anécdota que a la distancia muy pocos recuerdan pero para el ‘Kevin’ fue un poco injusto.
"Por más que quise ya no me dio la rodilla. En ese torneo prácticamente me aventé todos los minutos, pero en la Liguilla ya no pudo ser así", comentó en entrevista con RÉCORD.
"Primero en la Ida contra Cruz Azul me expulsan algo que no era muy común en mi y ya no pude jugar la Vuelta en el Azul. Después regreso a la Final de Ida, soy titular y me lesiono, y ya no pude estar para la Vuelta en el Azteca a pesar de que quise infiltrarme porque no me la quería perder porque era la Final con el equipo de mis amores”, agregó.
Aquel galardón fue para muchos jugadores de ese equipo un sueño cumplido pero era una copa que no se les podía escapar de las manos y desde la Semifinal contra Cruz Azul lo sabían.
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“Fue un sueño un cumplido(ganar el campeonato con el América) desde niño la imagen que yo tenía del América es del equipo más más grande de México con el Azteca lleno, si bien debuté con el Atlante y pase por otros equipos, siempre me veía con el América y con ese sueño”, reveló el Gansito Padilla.
“El marcador parece que fue una Final sencilla o que se definió muy rápido, y la verdad es que no. Los dos partidos fueron muy complicados, ese Tecos jugaba muy bien, pero al final logramos imponer la calidad que teníamos. Además, haber goleado a Cruz Azul en la Semifinal nos había dado un levantón importante en lo anímico”, señaló el Gringo Castro.
