Mientras esperaban la llegada del autobús de América en el pasillo que formaron a las afueras del Estadio Azteca, aficionados azulcremas confundieron unos de los autobuses, pues creían que se trataba del transporte de Monterrey, por lo que de inmediato comenzaron a lanzar insúltos.e
Sin embargo, pronto se dieron cuenta de su error, pues se trataba de un autobús ajeno al equipo, por lo que de inmediato se calmaron los ánimos y comenzaron a reirse.
Por su parte, el cuerpo de seguridad al ver las acciones de los presentes, trató de mantener un cerco para evitar que se invada la calle y así evitar accidentes.
Ya con los ánimos calmados, los seguidores siguieron esperando entre cánticos y porras el arribo de los jugadores que los hacen soñar con la catorce.