Existe un vapor de revancha mexicana. Una ilusión, mitad ingenua, mitad verdad, de ya no ser lo que se fue. El México contra Alemania, de la Copa del Mundo, será la ocasión para desmoronar los presagios y de actualizar las desfavorables tendencias.
Marco Fabián, que vive, come, duerme y juega en el núcleo teutón, cuenta, sin filtro a RÉCORD, que en aquel país se tiene prohibida la minimización del rival, más allá de haberlo pulverizado con contornos de superioridad en la Copa Confederaciones. Cuestión de programación europea. Oportunidad mexicana que, culturalmente también, se crece ante la adversidad…
¿Hay una parte de ti que dice: ‘después de todo lo que sufrí, merezco ir al Mundial’?
Sí, sería mi mejor regalo, pero en esta carrera, en esta vida, nadie te regala nada. Uno tiene que trabajar para ganárselo. Voy a hacer todo lo posible para estar ahí y ganármelo, ya veremos qué pasa en los próximos meses, para mí sería un orgullo, un honor portar la playera de la selección, defender a mi país a tope y poder hacer historia en el Mundial.
Vives en Alemania, los enfrentaste en Confederaciones, le anotaste un golazo a Ter Stegen, ¿qué sensaciones te deja que sean el primer rival en la Copa del Mundo?
Cuando nos dimos cuenta del grupo que nos tocó, sobre todo Alemania, fue muy motivante y muy especial. Siempre sabemos que México se engrandece con equipos así, siempre hace buenos partidos. ¡Qué mejor motivación que enfrentarse al Campeón del Mundo, que es favorito para ganar el Mundial! Dentro de la cancha se le pierde el respeto, se tiene que jugar al tú por tú.
¿En Alemania qué se sabe del futbol mexicano? ¿Lo observan como un rival a modo, más allá de lo que sucedió en Confederaciones?
Ellos también, por lo que escucho aquí y lo que se habla, nos guardan un buen respeto, saben que no será fácil. En la cancha tendremos que demostrarlo. Hablan de que no será fácil, es una selección a la que se le guarda mucho respeto. Saben cómo jugamos, saben que hay buenos jugadores, de mucha calidad. Para ellos su primera palabra es ‘trabajo’, guardando el respeto indicado. Sabemos que hay muchos nombres y hay respeto por lo que han hecho, por su historia, pero dentro de la cancha los nombres se quedan por un lado.
Pareciera que ya no existe miedo escénico y que quienes juegan en Europa se sienten locales…
Sí, México lo perdió hace mucho tiempo, somos aptos para cualquier tipo de situación, no sólo los que estamos en Europa, también los que militan en México han jugado partidos internacionales, tienen historia
con la selección. Ese miedo quedó muy atrás. Tenemos la confianza, como profesionales, de enfrentarnos a quien sea y donde sea.
En Cruz Azul te planteaste la meta de ir al Mundial de Brasil 2014 y lo lograste. Pareciera que eres un hombre de retos, que cuando aprietas consigue esos objetivos…
Me gustan mucho los retos, ponerme metas, siempre busco lo más alto, siempre busco más. Lo logré y ahora es algo similar, lo primordial es estar bien físicamente, estar a tope, encontrar mi mejor ritmo, pero soy positivo. Sé que estoy a tiempo. Tengo dos meses trabajando a tope, ahora a juntar minutos para estar dentro de esa lista.
