Durante la eliminatoria estamos viendo tres Estados Unidos diferentes. El que de local es dominante, impone condiciones 16 de 18 puntos (cinco victorias y un empate con Canadá), la otra versión es el que juega de visitante, replegado, jugando a la contra, descansando jugadores titulares, únicamente ha rescatado cinco puntos de 15 posibles y finalmente el equipo norteamericano que enfrenta a México y son unos demonios que aprietan y muerden sin la pelota, con el balón son verticales, que propone el juego en cancha rival.
Fuera de casa suma un gol en los últimos tres partidos, mientras que ante México anotó siete goles en tres encuentros.
Demasiado extremista las facetas de este equipo y se vuelve difícil pronosticar que versión vamos a vivir este jueves.
El sistema es claro 1-4-3-3 con la intensidad como la característica más representativa, en este rubro supera ampliamente al Tri, el equipo de las barras y estrellas tiene una mayor recuperación en el medio campo, permanentemente intenta incomodar al rival, eso lo puede hacer porque la plantilla convocada para enfrentar al Tri promedia 24 años con ocho meses. El contragolpe es su arma más importante al ser una escuadra ligera que busca agarrar mal parado al rival con transiciones a velocidad.
Esta versión que va a enfrentar a la selección nacional tiene bajas relevantes, Aaronson el volante del Salzburgo, Dest del Barcelona, Richards del Hoffenheim y Mckennie de la Juventus, nombres valiosos y titulares durante la eliminatoria. Además, tiene cinco jugadores que no están al 100 por ciento y cinco elementos que presentaron molestias al llegar a la concentración (Pepi, Weah, Reyna, Adams y Steffen) de los cuales solo Reyna que juega en el Borussia Dortmund, podría ser titular.
Es la segunda mejor defensiva de la eliminatoria con ocho goles recibidos.
Lo más preocupante para el Tri será la dinámica con y sin la pelota del cuadro norteamericano, la recuperación en el medio campo es un tema sin resolver para el equipo del Tata Martino.
La propuesta de USsoccer es una línea sólida de cuatro defensores, tres volantes (Acosta, De la Torre y Musah) con condiciones para realizar una presión alta de forma permanente, dos extremos veloces (Pulisic y Arriola) y un nueve que participe en la construcción como lo es Jesús Ferreira un jugador de origen colombiano y que actualmente en la MLS tiene tres goles en cuatro partidos.
