CARLOS GOROZPE
Fue un adiós de casa amargo, solitario y con los pocos aficionados azulcremas asistentes poniéndose en contra del América en los minutos finales en la derrota por 3-2 ante Puebla.
Las Águilas nunca encontraron el camino a la Liguilla en su feudo y ahora sólo les queda jugarse el orgullo restante en el último clásico de la temporada ante Cruz Azul la próxima semana y evitar que una combinación de resultados los deje como sotaneros del Apertura 2011.
Sin embargo, a pesar de ya saberse eliminados desde antes del silbatazo inicial, los cremas salieron a comerse al rival para darle una última alegría a su gente. Tres minutos le bastaron al juvenil Raúl Jiménez para estrenarse como goleador en el máximo circuito luego de que ante Santos le habían anulado un par, además de darle esperanza al futuro de la cantera.
Pero como ha sido toda la campaña, la "defensa de plástico”, como la bautizara el suspendido Ángel Reyna, volvió a hacer de las suyas, primero dejando que Lucas Silva los desbordara y centrara para la llegada de Luis García, que cerró la pinza al 41’.
Todo indicaba que llegaría el descanso con un empate, pero Armando Navarrate volvió a tener un error garrafal a segundos del término de los primeros 45 minutos y le dejó el esférico a Duvier Riascos, que lo bombeó para celebrar ahora sí con la playera bien puesta, evitando tarjetas amarillas.
La gente no se la perdonó a ‘Nava’ durante el complemento, hasta que terminaron volcándose en contra de todo el equipo después del cobro de una falta inexistente a nueve minutos del final por parte de Luis García. El delantero español sacó del letargo a los asistentes en el Azteca con una zapatazo que se anido por en medio de la barrera, poniendo el 3-1 a favor de los camoteros, que aprovecharon las falencias del América para meterse de lleno a la pelea por un lugar en la Liguilla.
Al final, Matías Vuoso, al 87’, se acordó del olfato goleador que algún día lo caracterizó y con un quirúrgico toque de balón techó al ‘Mostro’ Álvarez para poner cifras definitivas y sellar la cuarta derrota del campeonato del América en casa.
Así lo vivimos.