ÁLVARO CRUZ
Los Tuzos llegaron a la Ciudad de México con aires de tensión y preocupados en buscar revertir el resultado.
Efraín Flores y varios jugadores se negaron a dar declaraciones, pero el capitán Leobardo López dio la cara y resaltó que no se sienten perdidos a pesar del resultado adverso.
"Pero nosotros no nos sentimos muertos todavía, lo mínimo que podemos hacer es morirnos dentro de la cancha".
Agregó: "Llegamos pensando en remontar algo que es difícil, lo sabemos, pero no es imposible, saldremos a morirnos dentro de la cancha tratando de sacar el resultado, y si al final no lo logramos, al menos poder vernos a los ojos, saber que dejamos todo en el campo tratando de revertir la situación".
La polémica del arbitraje por el gol que le anularon a Félix Borja no preocupa a López, y pide dejar trabajar a Marco Rodríguez, aunque no sabe si es el árbitro ideal para este juego.
"No se si sea el mejor, pero es el que está y esperemos que haga un gran trabajo. Marco es un gran árbitro, a veces no se puede tener mucha comunicación con él, pero nosotros nos dedicaremos a lo nuestro".
Leobardo explicó la manera en que el Pachuca saltará a la cancha en busca de revertir el 3-1 en contra del primer duelo.
"Buscando el partido, tratando de hacer un gol y estando ordenados, concentrados atrás, porque sabemos que si nos vamos al frente dejando muchos espacios América es muy peligroso y un gol de ellos puede ser mucho peor".
El zaguero Tuzo aseguró que les ocupa el hecho de enfrentar a jugadores desequilibrantes, pero dijo estar metalizado en cómo frenarlos para evitar que vuelvan a hacer de las suyas.