AGENCIAS
Todo indica que los días difíciles han pasado para el arquero Miguel Calero, quien a sus 40 años se siente al cien por ciento y futbolísticamente un tanto fuera de ritmo, pero con las ganas de jugar, todavía sin pensar en colgar los guantes.
"Me siento muy bien, ya hice le pretemporada. Ahora hago trabajo de portería, ya estoy recuperado ciento por ciento y eso me tiene muy contento”, expresó el colombiano nacionalizado mexicano al concluir la práctica del Pachuca.
"En marzo del 2010 tuve la infección en tejidos blandos y en el torneo pasado más o menos en marzo también fue el problema del clavo de la infección”, añadió.
El guardameta de los Tuzos hizo memoria sobre el proceso de su lesión y recuperación: "Me sacaron un clavo de 26 centímetros donde desafortunadamente me ocasionaba mucha infección, perdí mucha fuerza, flexibilidad y opté por sacarlo y corregir la infección, afortunadamente se corrigió a tiempo, no dejé que llegara a la articulación porque ahí sí hubiera sido más complicado. Ahora ya estoy totalmente recuperado y trabajando, que es lo que me gusta”.
Cuestionado de si después de la lesión se puede pensar que vienen sus últimos torneos, respondió: "La verdad no me preocupa eso, al contrario, me motiva, me enseña y lo único que debo hacer es trabajar y tratar de buscar la oportunidad de jugar. Ya habrá tiempo para el retiro”.