JONATAN PEÑA
La ';varita mágica'; de Miguel Herrera terminó sus efectos, no pudo más de la Semifinal y a pesar de que cambió la cara del América en este torneo, eso no fue suficiente para evitar una nueva desilusión y amargura en la hinchada de las Águilas que pasará otro semestre sin título luego de la eliminación ante Monterrey.
El Estadio Tecnológico ratificó su estampa de némesis para las Águilas, donde siguen sin ganar en Liguillas tras la derrota de ayer (2-0), y el Piojo, quien sufrió otro sinsabor en la casa rayada, misma que sólo le produce recuerdos aciagos pues aquí perdió ya dos Finales como técnico del cuadro regiomontano.
Los locales se adueñaron del esférico en los minutos iniciales y de principio a fin fueron mejores. Tal parece que la lluvia que cayó al empezar el encuentro, ';mojó'; el ímpetu americanista, el futbol y las ganas de salir avantes en la serie, ya que nunca pudieron dominar al rival y en todo momento los pupilos de Vucetich mostraron más coraje a pesar de las circunstancias de la cancha.
Y es que el dios Tlaloc evitó que en el Tec se observara un juego vistoso y atractivo. Los resbalones y encharcamientos fueron una constante, sobre todo en el primer tiempo, había ofuscación de ideas, pero los Rayados sí pusieron esa dosis de ahínco y determinación que los condujo a la victoria.
Una jugada a balón parado abrió el camino del triunfo para Monterrey. Suazo metió un centro medido en tiro de esquina y fue José María Basanta el encargado de mandar el balón al fondo de las redes con un certero cabezazo imposible para Muñoz.
El inicio de la parte complementaria no dio visos de reacción azulcrema, Monterrey no prestaba el balón y todo fue color de rosa para el público regio que agradeció al cielo que la lluvia cedió un poco y a Aldo de Nigris cuando los hizo estallar de júbilo tras marcar la segunda anotación para su escuadra gracias a un remate de cabeza y un centro de César Delgado con la ';mano';.
"Quiere llorar, quiere llorar", fue el grito que surgió intempestivamente de las tribunas del Tec y que tuvo que soportar el técnico Miguel Herrera al estar cerca el final del partido. La temporada para América concluyó con ';gotas'; de frustración, el sueño se acabó y las vitrinas de trofeos de Coapa se quedarán esperando como ha sucedido desde hace siete años.
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