Para Justino Compeán, presidente la Federación Mexicana de Futbol, el arbitraje ha tenido muy malos partidos, sin embargo, descarta que exista una crisis.
"Definitivamente no es crisis, no lo considero como crisis, fueron dos pésimos partidos en esta jornada pero también muy malos partidos; es un torneo donde se está jugando el descenso, por lo mismo hay una presión tremenda, hay un equipo grande, mucho muy popular que está involucrado", señaló en entrevista con Televisa Deportes, luego de la presentación de la Copa Coca Cola.
El directivo aseguró que metería las manos al fuego' por el trabajo de los silbantes, al tiempo que recordó que éstos son humanos y pueden equivocarse.
"Sí es preocupante y ocupante pero como todo, como la falta de gol a un equipo, porque son humanos, lo que sí no hay es dolo, no hay falta de integridad, yo pongo las manos al fuego por el arbitraje mexicano".
Por otra parte, descartó que el riesgo de que un equipo con la importancia de Chivas descienda influya en la labor de los árbitros quienes, a su juicio, están ante 22 jugadores que buscan engañarlos.
"Definitivamente no (influye) pero la presión con la que entras, en eso tenemos que trabajar, en la personalidad del árbitro. Los señores están en forma, saben hacer las cosas; el árbitro está solo contra 22, y esos 22 también están con ganas de engañarlo, ahí tiene que haber un poquito de labor por el otro lado".
Compeán apuntó que se trató de cumplir con lo que los silbantes solicitaron tras la amenaza de huelga, por lo que ahora les toca responder en el terreno de juego.
"Espero resultados y las palabras se las lleva el viento, la única manera de ver si el arbitraje está mejorando es que jornada a jornada tengamos mejores trabajos".
