El enojo de André Pierre Gignac por el penalti no marcado en la Final del Clausura 2017, en contra de Chivas, llegó a tal grado que el francés quiso golpear al árbitro Luis Enrique Santander.
A través de un breve video que forma parte del documental que se hizo en su honor, el delantero expresó su sentir tras la jugada en el área que protagonizaron Jair Pereira e Ismael Sosa.
"Yo le di la pelota, yo estaba atrás de él viendo la jugada, igual que él. Cuando vi la patada es obligado que va a pitar y no lo hizo. Le voy a pegar", confesó.
El material audiovisual muestra la frustración de un delantero de Tigres que también venía de la decepcción de una dolorosa derrota en la Eurocopa de 2016. "Voy a tomar medicamento en el avión, no quiero pensar en nada. Quiero dormir todo el vuelo", finalizó.