Con 35 años de edad y 14 torneos jugados en Cruz Azul, Christian Giménez se mantiene como el motor de La Máquina. A pesar de la fuerte competencia que hay dentro del plantel, el argentino pasó de ser el revulsivo a ganarse un lugar en el once titular de Tomás Boy, a quien le ha respondido con goles y buenas actuaciones ya sea jugando de inicio o de relevo.
“Trato de no soltarla (la titularidad), trato de aprovechar todos los entrenamientos y partidos para estar, me gusta estar dentro de la cancha. Sé que a veces el técnico toma las mejores decisiones en la alineación y me toca esperar, pero trato de hacerlo mejor cinco, 10 o 90 minutos de la mejor manera”, dijo Giménez a RÉCORD. “No hago nada, sólo trabajo, nada más”, agregó.
El Chaco ha sido un amuleto para su equipo, ya que de los cuatro partidos que tiene como titular en el campeonato son dos triunfos, un empate y una derrota dolorosa contra el América en un partido en el que anotó dos de los cuatro goles que lo tienen junto a Joao Rojas como los mejores anotadores del equipo.
“Eso es circunstancial. El equipo en estos últimos partidos se ha mentalizado y ha sabido que tenemos que jugarnos el todo por el todo, este quien este dentro de la cancha; estábamos haciendo un mal torneo y de a poquito estamos repuntando, todavía falta mucho, pero el equipo ha tenido una mejoría en general”, explicó el futbolista argentino.
La paciencia ha sido una de las mayores virtudes de Giménez, quien esperó siete fechas para volver a la titularidad, algo que Guillermo Álvarez no entendía, por lo que previo al juego frente a Tigres dejó entrever que Chaco debía estar en el once inicial.
“Desde el principio tiene que estar la alineación más fuerte tanto física como mentalmente y hay jugadores que necesitan iniciar y sabemos que más allá de que aguanten 60 o 70 minutos, lo importante es que desde el primer minuto esté el mejor plantel”, dijo el presidente cementero a los medios de comunicación.