La afición de Chivas sufrió con la reventa en el Estadio Nemesio Díez, pues el precio en el que les dejaban los boletos era más caro que los que se les ofrecían a seguidores del Toluca, quienes también se acercaron a los revendedores para comprar sus entradas para la Ida de la Semifinal.
Los precios del boletaje oscilaban entre los mil 800 pesos y los dos mil 500, para los seguidores de los Diablos, mientras que los del Rebaño debían pagar entre los dos mil y los tres mil pesos.
Dicha situación causó molestia entre los aficionados de Chivas, pues esta medida fue impuesta para que las tribunas del Nemesio no se vean pintadas de rojiblanco.
Algunos seguidores del Guadalajara tuvieron que quitarse la playera de su equipo para poder acercarse a los revendedores y que el precio no se les elevara tanto.
“Es una grosería que los revendedores incrementen el precio sólo porque somos aficionados de las Chivas, si fueran inteligentes podrían dar los boletos más baratos y así vender todos”, comentó Javier Zurita, seguidor rojiblanco.
La policía hizo caso omiso al llamado de algunos fanáticos que intentaron denunciar los abusos de la reventa.