La carrera de los dos jugadores juveniles de Chivas, Fernando Ponce y Ulises Cardona, quienes cometieron una indisciplina durante la Jornada 2 en Monterrey, corre peligro, pues al ser despedidos del club deberán pagar 100 mil pesos a la directiva rojiblanca para recuperar sus derechos federativos.
Ambos jugadores metieron mujeres al hotel de concentración y, tras una investigación que realizó la directiva del Rebaño, también se determinó que el entrenador del equipo Sub 20, Manuel Martínez, fuera separado de su cargo.
Martínez quedó fuera por no saber controlar al plantel y permitir esta indisciplina de los jugadores juveniles.
A la directiva no le interesó que el ahora exentrenador estaba entregando buenos resultados en el equipo juvenil, ya que dejó al equipo en la quinta posición con siete unidades, e incluso muchos de sus jugadores ya son tomados en cuenta para entrenar con el primer equipo, bajo las órdenes del técnico Matías Almeyda.
Ramón Baeza y Nicolás Morales son los que ahora dirigen al equipo Sub 20 del Rebaño, los cuales debutaron con una derrota el sábado pasado frente a Querétaro, luego de que, con Manuel Martínez, marchaban con un paso invicto.
