MIGUEL GARCÍA
Hasta hoy, la peor versión del Guadalajara en una Copa Libertadores es la de 1998, cuando sólo consiguieron dos victorias, ambas en casa. En esta ocasión, si no logran derrotar al Deportivo Quito a domicilio, sellarán su actuación más penosa en la historia del certamen.
Tras cinco partidos, Chivas sólo fue capaz de vencer al Defensor Sporting en el Estadio Omnilife y de rescatar un punto de último minuto contra el Deportivo Quito. El resto de sus juegos terminaron en derrotas.
Sólo suman dos goles y recibieron siete, y sus posibilidades de avanzar a la siguiente ronda de la justa son mínimas.
Estos resultados parece que harán olvidar la triste primera actuación rojiblanca en la Libertadores de 1998, cuando sólo fueron capaces de vencer a Vasco da Gama (1-0) y Gremio (1-0) en el Estadio Jalisco.
Bajo el mando de Ricardo Ferretti, los rojiblancos terminaron esa participación con cuatro descalabros (dos contra América) y dos triunfos, sin avanzar. En 2008, Chivas tampoco superó la primera ronda de la Copa; sin embargo, consiguió nueve puntos, producto de tres victorias (dos sobre el San José y una frente al Santos).
Ese Rebaño, dirigido por Efraín Flores, fue capaz de anotar ocho goles y terminar con más tres en su diferencia, pero Santos logró un punto más y se metió a los Octavos de Final.
En 2005, 2006, 2009 y 2010, el Guadalajara dejó un grato sabor de boca en la Libertadores, instalándose en dos Semifinales y una Final, que perdió contra el Inter de Porto Alegre.
Este Guadalajara de 2012 está a punto de ganar un sitio entre las peores actuaciones mexicanas en el certamen sudamericano y será recordado como el Chivas más ineficaz en su paso por la Libertadores. Matemáticamente vive en la justa, pero sus posibilidades reales son escasas.